¡Sonría, por favor!

Este libro nos ha gustado mucho, ya que nos parece maravilloso para los niños. Rompe con los esquemas y con los estereotipos típicos de padre-trabajador, madre-ama de casa.

Cuenta la historia de una familia de topos, el papá topo se llama Max, la mamá topo se llama Maya, los hijos mellizos se llaman Mona y Marius, y con ellos vive la abuela topo, que es muy mayor y se mueve gracias a una silla de ruedas eléctrica, donde pueden montar sus nietos y así divertirse juntos. Pero no es la típica familia, no. Maya es la que trabaja, Max antes era minero, pero ahora se dedica a cuidar de su familia.

Nos encanta este cambio de roles, ya que ayuda a los niños a darse cuenta de que las mujeres no son las que tienen que estar en casa, ni los hombres los que trabajen para mantener el hogar. Es muy importante que no hagan diferencias de género marcadas por las labores que lleven a cabo. Si con este cuento pudiésemos reducir el machismo entre los niños nos sentiríamos afortunadas.

Pero prosigamos contando de qué va el libro. En el cumpleaños de los gemelos, Maya (mamá topo) les regala a Marius una muñeca y a Mona una grúa. Cuando llegamos a este punto de la lectura ya estamos convencidas de que es un libro que recomendamos encarecidamente, pues rompe moldes: ¿porqué las muñecas deben ser sólo para niñas y las construcciones para niños?.

La familia Topo sigue viviendo situaciones divertidas, como los inventos de los niños para no ir al cole, o aquella vez que se quisieron hacer una foto de familia, o cuando fueron de acampada...

Nos encanta, y recomendamos tanto a padres como a maestros que lo lean en clase y en casa. Puede ayudar a cambiar las perspectivas de cómo se supone que debe ser una familia. Hay muchas clases de familia, ninguna mejor que otra, y es imprescindible que los niños lo sepan para que así no puedan juzgar a aquellos que no tengan una como la suya.

Bos B. (1995) ¡Sonría, por favor!  Madrid. Editorial SM.

Las ilustraciones son de Hans de Beer.